Hace un tiempo, Wannacry sembró el pánico a nivel mundial por ser un virus criptográfico que tuvo una gran expansión e infectó millones de equipos, encriptando los datos de los afectados y haciéndolos imposibles de recuperar.

Pues bien, en este mundo interconectado es imposible estar 100% a salvo, y ha aparecido un nuevo tipo de ransomware de nombre Bluekeep que pretende hacer estragos sobre todo en los equipos con versiones de Windows antiguas.

El virus se propaga explotando una vulnerabilidad de Escritorio Remoto de Windows (RDP), en versiones de Windows anteriores a Windows 8. Incluso hasta la agencia NSA estadounidense ha instado a los usuarios a actualizar sus equipos cuanto antes, pues ya existe un parche para protegernos.

Si no necesitamos Escritorio Remoto, conviene deshabilitarlo de nuestros sistemas. Pero si es necesario para nuestro trabajo diario, recomendamos cambiar el puerto por defecto 3389 y, muy importante, activar la protección a nivel de red de Escritorio Remoto.

Si estás usando RDP en tu empresa y no sabes si lo tienes bien configurado, contacta con nosotros cuanto antes.